LES CAYÓ LA FISCALÍA GENERAL DE JUSTICIA DEL ESTADO DE TAMAULIPAS.
Sorpresiva y estupenda labor humanitaria por parte de policías de la fiscalía general de Justicia del Estado de Tamaulipas.
Este día de Reyes, fue una tarde de sorpresas para los niños del Chipus en Ciudad Madero, cuándo vieron que llegaba personal de la fiscalía general de Justicia del Estado en las características camionetas blancas a su colonia, solo que en esta ocasión no andaban realizando ningún tipo de investigación y mucho menos tenian el afán de ejecutar alguna orden de aprehensión.
SE TRATABA DE UNA LABOR HUMANITARIA EN FAVOR DE LOS NIÑOS.
Todo empezó cuándo comandante Antonio Puente Gallegos y el segundo de abordo Rubén Marciano, convocaron al personal a su mando, haciéndole saber que requerían de más proximidad con los ciudadanos, que no se les podía olvidar qué eran servidores públicos y estaban para servir a la sociedad, también aseveró -no está bien que la gente nos tenga temor o en otro tipo de concepto, tenemos que buscar remedio a esto- enseguida ambos comandantes términaron pidiendo a cada uno qué llevarán un juguete para repartirlos entre los niños en las zonas que son consideradas focos rojos o de alta incidencia.
La reacción no se hizo esperar por parte de todo el personal, todos cooperaron y además, también todos querían participar en la repartición de juguetes para los niños, esto último no fue posible ya que alguien se tenía que quedar a cumplir con las guardias.
Vale decir que esta no es la primera ocasión en qué personal de la fiscalía y específicamente policías realizan labores de altruismo de este tipo, solo que en ocasiones anteriores me han pedido que no publiqué nada, para que no se pierde el sentido de la verdadera generosidad.
También hay que señalar que estos y otros policías en diferentes partes del estado, han estado presentes apoyando a la ciudadanía cuando se han presentado desastres naturales, aún encontrándose en sus días de descanso,.
De igual manera, en esta nota quiero recordar a mis estimados amigos, que en diferentes ocasiones he manifestado que he sido testigo de cómo algunos policías de la fiscalía sacan dinero de su bolsa para comprar alimentos y medicinas a personas que lo han requerido. De esto último también me he tenido que quedar callado para no meter en problemas a quiénes realizan labores humanitarias.
Por lo que se confirma lo dicho, no todo está echado a perder en la fiscalía del estado de Tamaulipas, existen personas con una alta ética profesional y la camiseta de la institución bien puesta. Por dos o tres personas qué hacen mal las cosas no podemos generalizar y señalar a todo el personal, es por eso que cuando alguien se equivoca o tuerce la ley, es mejor señalarlo con nombre y apellido porque de lo contrario se corre peligro de que paguen justos por pecadores.
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